Para crear una pieza mecánica, a partir de una chapa metálica, es necesario tener en cuenta una serie de factores. Por un lado, la maquinaria, la cual tiene que ser adecuada y de primer nivel para que el resultado sea óptimo. También es importante la experiencia del personal que la emplea, por supuesto.

En este caso, nos queremos centrar en un apartado realmente importante, como son los tipos de corte de chapas de metal. Así, cada proceso tiene en cuenta factores como el tipo de piezas que se desean cortar, la complejidad del corte y el tiempo de desarrollo.

Tipos de corte de chapa metálica

A continuación, os vamos a mostrar algunos de los tipos de corte de chapa metálica que se produce en un taller. Hablamos de 7 procesos distintos, como vamos a ver.

Corte por Láser

El corte por láser es una de las mejores técnicas de corte de mecanizados. Es un proceso térmico, con el que el recorte se somete a vaporización, gracias a la elevada temperatura de corte. La energía del láser concentra la luz en una superficie de trabajo, emitiendo radiaciones luminosas. El corte se produce mediante el uso de espejos deflactores, los cuales se encargan de reducir el diámetro del haz, aumentando temperatura y potencia. Esta técnica, en cualquiera de sus variantes, es perfecta para procesos de corte que requieran de cierta complejidad, con precisión rapidez. En Talleres Avance, contamos con una amplia experiencia en el corte de chapa por láser, ¡consúltanos!

Corte por Plasma

El corte por plasma es un proceso térmico, donde el corte se logra mediante la fusión del metal. Así, el proceso consiste en el calentamiento localizado de la zona de corte a temperaturas muy elevadas. Se provoca un arco eléctrico en la sección de la boquilla del soplete. Gracias a ello, se concentra una cantidad de energía cinética que ioniza la puna del soplete, dotándole de la capacidad de corte. Este tipo de proceso puede ser muy útil para grandes piezas de metal, pero no así para pequeñas, puesto que puede deformar toda la pieza.

Oxicorte

El oxicorte es una técnica en la que se calienta el metal a una elevada temperatura, gracias a la llama producida por oxígeno y un gas combustible, que puede ser hidrógeno, acetileno, propano o tetreno. Posteriormente, una corriente de oxígeno corta el metal, eliminándolos óxidos de hierro. Este proceso no se utiliza únicamente para cortar la chapa, es un proceso auxiliar a la soldadura y su objetivo es preparar los bordes de la pieza, sobre todo en piezas de considerable grosor, para que sean soldadas.

Corte con Chorro de Agua y Abrasivo

Ahora, os vamos a hablar de un tipo de corte que se puede considerar “revolucionario”. Mediante un dispositivo de chorro con agua a presión el chorro, compuesto por agua y abrasivo, sale con una presión suficiente para cortar el material. Si el material no es muy duro, puede utilizarse solo agua, aunque en el metal suele utilizarse esta mezcla. Se trata de una técnica perfecta para cortes de chapas que no se puedan deformar con el calor, ya que esta técnica funciona en frío.

Punzonado de Chapa

El punzonado de chapa es un proceso mediante el cual se coloca una lámina de metal bajo el troquel de una prensa hidráulica. Así, las láminas se someten a una gran presión, consiguiendo que se realice una perforación totalmente limpia, al fracturar y separar la chapa del material recortado. Si bien es cierto que se trata de un proceso rápido, tiene diversos inconvenientes. Por ejemplo, no está diseñado para cortar pieza de grandes espesores, mientras que necesita de otros procesos para finalizar adecuadamente el corte.

Cizallado

Proceso mecánico muy clásico. En este caso, el corte se produce a través de dos cuchillas que se deslizan entre sí, produciendo el aplastamiento y corte parcial por penetración en la lámina a cortar y que finaliza en la consiguiente fractura. Es una técnica que se realiza en frío y que es útil para cortes rectos. De hecho, muchas veces se emplea para fraccionar grandes láminas con las que trabajar posteriormente.

Aserrado

Si el corte por cizallado implica “un corte limpio”, cuando se habla del aserrado, se desprende viruta durante el proceso. Las sierras, en este caso, están constituidas por carburo metálico, un material lo suficientemente duro para cortar diferentes metales y que aguantan mejor la elevadas temperaturas que hay durante el proceso.

Como puedes ver, hay diferentes procesos de corte de chapa, destinados a conseguir la pieza deseada.